La Cordillera de Los Andes es una de las cadenas montañosas más importantes del mundo y sin duda la más relevante para Chile. Extendiéndose de extremo a extremo a lo largo del país, con más de 7000 kilómetros de longitud total y 4300 en el territorio chileno, esta maravillosa cordillera se caracteriza por sus altos nevados, valles profundos y rica biodiversidad, los que hacen de ella un elemento fundamental en la conformación geográfica, económica y cultural del país.
La Cordillera posee una serie de características que la convierten en un lugar de enorme relevancia, no solo para Chile sino para el mundo en general. En primera instancia, su asombrosa variedad de paisajes, climas, ecosistemas y altitudes la convierte en un destino perfecto para realizar todo tipo de actividades turísticas, deportivas y científicas de gran importancia internacional, sin dejar atrás el valor inestimable que posee en términos de biodiversidad en toda su extensión territorial.
Siendo más específicos, un ejemplo destacado de estas características son indiscutiblemente las imponentes alturas de algunas de sus montañas. El Aconcagua, la cumbre más alta del continente americano se alza majestuosamente con aproximadamente 6.960 metros sobre el nivel del mar. Esta imponente montaña atrae a miles de montañistas de todas partes del mundo, quienes desafían sus verticales paredes en busca de la cima. Otro destacado es el volcán Ojos del Salado, considerado el segundo volcán más alto del mundo; dos casos que son solo una muestra de la grandeza y desafío que esta ofrece a los amantes del montañismo y la aventura.
Otra razón por la cual podemos afirmar que la Cordillera de Los Andes actúa como una columna vertebral vital para Chile, es su abundante cantidad de glaciares que alimentan ríos y cuencas hidrográficas de todo el país; esta cadena montañosa es la encargada de proporcionar un suministro constante de agua dulce, beneficiando diferentes sectores productivos como la agricultura, la generación de energía y sobre todo la vinicultura, por solo mencionar algunos ejemplos.
La diversidad biológica de la Cordillera de Los Andes también es asombrosa. A lo largo de la cordillera, se puede encontrar una amplia variedad de ecosistemas, que van desde bosques templados hasta altiplanos a miles de metros de altura. Estos diferentes hábitats albergan una rica flora y fauna, incluyendo especies endémicas que son de suma importancia para el equilibrio ecológico y la biodiversidad.
Además, no podemos dejar de mencionar que, en el caso de la elaboración de vinos chilenos de alta calidad, la Cordillera cumple un rol primordial para la protección natural de los viñedos frente a amenazas como plagas o influencias climáticas no deseadas que pudieran afectar a los viñedos; y si de la viña Alyan hablamos, no podemos dejar de reconocer la importancia que la Cordillera de Los Andes tiene para la elaboración de nuestros vinos.
Al contar con viñedos que se sitúan a los pies de la Cordillera ocurre un fenómeno digno de mencionar. Durante las noches y en las temporadas de menor temperatura, el frío natural de la Cordillera desciende hacia las faldas del cerro, cubriendo los viñedos y produciendo una diferencia de temperatura mayor entre día y noche e invierno y verano. Este fenómeno actúa como una barrera protectora contra las altas temperaturas del verano, lo que se traduce en una maduración más lenta de las uvas que incidirá directamente en la calidad de nuestras cosechas.
En nuestro reconocido Alyan Sunset tendrás la oportunidad de degustar vinos elaborados a los pies de la cordillera, transmitiendo a través de ellos la majestuosidad de Los Andes. Además, podrás presenciar los cambios que se dan en la montaña a lo largo del paso de las estaciones a medida que avanza el año, pudiendo admirar la nieve en invierno y el verde en verano.
Te invitamos a visitar Chile y descubrir la magnificencia de la Cordillera de Los Andes. Sumérgete en su grandiosidad, disfruta de sus paisajes imponentes y déjate cautivar por la influencia que ejerce en la producción de los vinos chilenos de renombre internacional.
¡Salud!